Muy cerca de Santander y enmarcada en un paraje único rodeado por bosques y prados verdes, se encuentra Torrelavega, la segunda ciudad más grande de Cantabria.
Con una ubicación estratégica entre Asturias y la meseta, tuvo un gran desarrollo en la época industrial con el asentamiento de fábricas durante la segunda mitad del siglo XVIII. De fuerte tradición ganadera y famosa por sus ferias, Torrelavega es una ciudad que se ha convertido en un importante punto comercial.
¿Quieres descubrir algunos de los lugares imprescindibles de Torrelavega? Pues sigue leyendo para conocer qué ver en tu escapada en tren a Torrelavega.
La mejor forma de conocer Torrelavega es perderse por su casco histórico peatonal y descubrir lo mucho que tiene que ofrecer al visitante Torrelavega.
¿Ganas de una excursión? Conoce los alrededores de Torrelavega y déjate enamorar por sus paisajes increíbles. La ciudad se encuentra muy próxima de localidades de cuento como Santillana del Mar o Comillas o a tan solo 10 km de la Costa de Suances. Si eres un amante del senderismo o de las rutas en bici, anímate a subir el Monte Dobra. A 600 metros sobre el nivel del mar ofrece una de las mejores panorámicas de Torrelavega y sus alrededores. ¡No olvides tu cámara!
Aunque no tendrás que salir de Torrelavega para disfrutar de la mejor naturaleza. Podrás pasear por el Parque de la Viesca, a las orillas del río Besaya, puro campo sin salir de la ciudad. O hacer deporte en el Parque Manuel Barquín, el mayor parque urbano de Torrelavega, con 30.000 metros cuadrados de zonas verdes.
Tampoco te puedes perder una visita a Viérnoles, dentro del municipio de Torrelavega. Su conjunto arquitectónico y monumental, formado por palacios y casonas de los siglos XVII al XIX, como la Casa de Velarde o Ceballos, declarada Bien de interés local, es una auténtica joya.
Torrelavega tiene una gastronomía basada en la tradición y los productos locales de calidad. Cocido montañés con productos de la matanza, potajes de otoño, lechazo, los estofados de carne de caza… Sin duda Torrelavega te dejará con buen sabor de boca.
Es, además, un destino famoso por el hojaldre, convirtiéndose en una auténtica seña de identidad. Tartas, milhojas, almendradas, lacitos y por supuesto, ¡polkas! El dulce típico de Torrelavega que consiste en una base hojaldrada cubierta de glasa real, un merengue sólido muy dulce. Los más golosos podrán disfrutar de todos estos postes hojaldrados en cualquiera de las muchas confiterías de la ciudad. Aunque, también pueden servir como buen souvenir de lo más dulce.
¿Ya tienes claro que debes visitar Torrelavega? ¡Genial! Consigue tus billetes de tren al mejor precio y disfruta de esta ciudad llena de singularidades y monumentos históricos. Viaja de forma segura, cómoda, rápida y sostenible con Renfe. Consulta nuestras rutas.