Tren de alta velocidad de Renfe que circula hasta a 300 kmh. Al ser una marca registrada por Renfe Operadora, cualquier otro uso de este término es incorrecto.
Infraestructura gestionada por Adif, que comprende, entre otras cosas, las vías, la catenaria y la señalización. Una línea de alta velocidad permite circular a trenes de diferentes compañías, que operan servicios con distintas denominaciones, entre ellas, el AVE de Renfe. Debe hablarse, por tanto, de línea de alta velocidad (o LAV) para referirse a la construcción, mantenimiento o situaciones relacionadas con esta infraestructura.
Administrador de Infraestructuras Ferroviarias. Empresa perteneciente al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana propietaria y gestora de las líneas (tanto de alta velocidad como convencionales), las estaciones y todos los equipos y servicios asociados a ellas. Es, además, como encargada del tráfico ferroviario, la responsable de cortar o modificar trayectos, en aras de la seguridad y mejora de la circulación.
Es el tren de alta velocidad de Renfe que permite viajar a 300 kilómetros por hora con todas las comodidades, y al mejor precio; desde 7 euros, con un precio fijo de 5 euros para menores de 14 años y descuentos para familias numerosas.
Tren de alta velocidad de Renfe, hasta a 250 kmh, y que está preparado para circular también por vías convencionales. Esto le permite aprovechar las LAV existentes para llegar con un importante ahorro de tiempo a ciudades que todavía no cuentan con esas infraestructuras.
Tren de alta velocidad de Renfe, hasta a 250 kmh, que realiza trayectos de media distancia designados como Obligación de Servicio Público (OSP) por el Estado. Son servicios subvencionados por su interés social, y por tanto, más económicos que los servicios comerciales.
Los trenes de alta velocidad de Renfe permiten a sus pasajeros llegar a más destinos que nadie, directamente o en combinación con otros servicios. La flota de Renfe cuenta con trenes que pueden circular indistintamente por LAV, vías convencionales o incluso vías sin electrificar. Además, la capilaridad de los servicios de Media Distancia y Cercanías acerca la alta velocidad ferroviaria a decenas de ciudades y pueblos de toda España.
Las estaciones de alta velocidad pertenecen a Adif, que gestiona todo lo relativo a ellas: controles de acceso, locales, obras, baños públicos, servicio de asistencia Acerca, objetos perdidos, mobiliario, teleindicadores, megafonía... Renfe dispone en todas ellas de espacios arrendados a Adif, como taquillas, atención al cliente o salas Club.
En Renfe nos preocupa tu tiempo. Queremos llevarte a tu destino cuanto antes, pero sobre todo decirte con exactitud cuándo vas a llegar. No nos valen las excusas: si viajas en AVE, Avlo, Alvia, Euromed e Intercity y no llegas puntual, sea por la razón que sea, te ofrecemos el mejor sistema de indemnizaciones.
Desde 2021, otras compañías operan servicios comerciales de alta velocidad ferroviaria en España: Ouigo, propiedad de la empresa estatal de Francia, SNCF; e Iryo, participada por la empresa estatal Trenitalia. Aunque son trenes de alta velocidad, ni sus trenes ni sus servicios pueden ser designados bajo la marca AVE, exclusiva de Renfe Operadora.