Las comarcas extremeñas de Sierra de Gata y Las Hurdes no solo comparten la denominación de origen: también historia y una naturaleza envolvente.

Trevejo es conjunto histórico por las ruinas de su castillo de origen musulmán, previo al siglo XII, situado en la pedanía del municipio cacereño de Villamiel. Parte del recinto se usa como cementerio municipal.

 

Texto: Jaime Lorite

Un modo de desenmascarar a un forastero en Extremadura es preguntarle qué entiende por una ensalada de naranja o limón, de toda la vida. Si no concibe que lleve chorizo, panceta y huevos, las sorpresas que le aguardan a su paso por Sierra de Gata y Las Hurdes acaban de empezar. “Es un plato contundente. A mucha gente la mezcla le parece disparatada, pero se basa en el aprovechamiento y está muy rico”, promete Carlos Gómez, responsable del Centro de Interpretación del Agua y del Medio Ambiente de Las Hurdes.

El entorno, que comparte con la Sierra la Denominación de Origen Gata-Hurdes para su aceite, es célebre por su personal gastronomía, pero también por sus paisajes y las singulares construcciones levantadas sobre el irregular terreno, denominadas arquitectura negra hurdana. “Se basa en la piedra de pizarra, muy dura y resistente. Se podrían considerar construcciones bioclimáticas, por cómo conservan la temperatura en verano e invierno, y están unidas, sin casi impacto en el paisaje”, explica Gómez, que cita como ejemplo las alquerías de Riomalo de Arriba o El Gasco. Se especula con que se edificaron a imitación de los celtas, posibles antiguos pobladores: “Puede ser, ¡hay mucho salto genético en Las Hurdes! Familias con todos morenos donde, de pronto, sale uno blanco y rubio, casi cano”.
 

Un pasado cinematógrafo que atrae

Al hablar de esta comarca, a cualquier cinéfilo le vendrá a la mente el nombre de Luis Buñuel, que en 1933 rodó allí ‘Las Hurdes, tierra sin pan’, retrato de la pobreza de la España de entonces, amplificado bajo el prisma del cineasta. Sin embargo, Carlos Gómez afirma que la película ahora favorece el turismo, por el cambio experimentado: “Es parte de nuestra historia y ayuda a ver las mejoras que ha habido en todos los ámbitos, sobre todo en las infraestructuras”. Algunos municipios ya no tienen habitantes, pero siguen despertando interés por la peculiaridad de los asentamientos, como sucede en Despoblado del Moral. Otros pueblos se inundaron por la construcción del pantano de Gabriel y Galán, aunque cuando baja el nivel puede contemplarse su antiguo esplendor. Es el caso de Arrofranco, al norte del meandro del Melero, otro gran reclamo junto a los meandros de El Gasco. “El mirador del meandro del Melero es muy accesible”, apunta Gómez. “Yo he hecho allí alguna actividad relacionada con la observación de animales, porque en esa zona hay ciervos, corzos, jabalís… Y se puede enlazar con el Chorrituelo de Ovejuela, de lo más bonito y espectacular”.

El meandro de El Melero, entre los grandes reclamos turísticos naturales de la comarca de Las Hurdes.

Mirar con otros ojos el cielo

 

Chorrerón de Moraleja, en plena Sierra de Gata, junto a una cascada en el río Árrago, es el primer Paraje Starlight de Extremadura por la calidad de sus cielos.

Tanto Las Hurdes como Sierra de Gata cuentan con reservas certificadas Starlite, por su falta de contaminación lumínica, que permite admirar la noche estrellada. “A veces soy guía de cielos”, se describe, entre risas, María Jesús Nuevo, del Centro de Interpretación de Sierra de Gata. La profesional recuerda que, en la zona, mirar a los cielos equivale también a contemplar una avifauna impresionante, con buitres negros o leonados, además de las grullas (con un censo en torno a 8.000 ejemplares) que, desde el otoño hasta febrero, habitan el embalse de Borbollón, en Santibáñez el Alto.

“Lo mejor es ir al atardecer, por el sol y porque es cuando llegan a los dormideros”, recomienda Nuevo que, asimismo, ve esa franja horaria como ideal para visitar el conjunto histórico de Trevejo, pedanía del municipio de Villamiel donde se conservan las ruinas de un castillo musulmán. Igualmente en Santibáñez el Alto es posible visitar otro conjunto antiguo, el del barrio de Los Pajares, con características construcciones en piedra seca, sin argamasa. Y para una ruta variada y completa, tres curiosidades: Torre de Don Miguel y sus once antiguos molinos (diez de aceite y uno de grano), Robledillo de Gata (uno de los Pueblos Más Bonitos de España, en la zona del valle del Árrago) y el monumento natural de la Peña Montá. Este último, ideal para amantes de la fotografía, como la propia María Jesús, que enseña una imagen que le tomó allí a su marido, de pie sobre la roca frente a unas asombrosas vistas: “La panorámica es impresionante. ¿A que es como si estuviera surfeando?”.
 

Notas interesantes para el cuaderno de viaje...

La localidad de Robledillo de Gata en la Sierra de Gata.

La arquitectura negra de Las Hurdes responde a las necesidades climatológicas y los materiales de la zona.

Los trenes de los servicios Alvia e Intercity enlazan Madrid con Cáceres en 3 horas.