En la ciudad de las cinco colinas, la cultura marca el ritmo. Sobre todo en verano, cuando arranca el festival La Mar de Músicas. Aunque otro faro también ilumina su vida tranquila: su Teatro Romano. Ambos se entienden y complementan.

Texto: Amelia Castilla
Fotos: Iván Urquízar


Arrancaron casi al unísono en 1995. El Festival La Mar de Músicas debutó sin mucho público con el grupo brasileño Olodum en el Auditorio del Parque Torres. Paco Martín (Cartagena, 1956-2018), funcionario municipal, recibió el encargo de revitalizar una ciudad que quedaba desierta en los meses de verano. El escenario, recién rehabilitado, se estrenó unos meses antes con una actuación de Serrat y decidieron probar suerte con un evento musical que reuniera las músicas del mundo. La vista de la bocana y las gaviotas sobrevolando el puerto completarían la idílica postal en las noches de concierto. Desde allí mismo, apenas a unos metros en la ladera norte de la colina, un grupo de arqueólogos arrancaba la excavación de lo que podría ser un teatro romano, quizás de la época ‘augustea’.

Transcurridas casi tres décadas, el paisaje figura irreconocible. Cartagena ocupa un lugar de honor en el mapa de los festivales europeos (por sus escenarios han pasado casi 6.000 músicos) y el Teatro Romano, inaugurado el 11 de julio de 2008 tras su recuperación integral proyectada por el arquitecto Rafael Moneo, ha recibido más de dos millones de visitantes. Ambos hitos, ruinas y festival, han sido definitorios para el cambio radical de la ciudad en las dos últimas décadas.

Mural homenaje a Paco Martín

El combo de música e historia

Banda de rock alternativo Arde Bogotá

Unos días antes del arranque de la próxima edición de La Mar de Músicas de este año (del 14 al 22 de julio), la banda de rock alternativo Arde Bogotá, originarios de Cartagena y parte del cartel de este año, posaba para esta revista bajo el túnel de la calle Gisbert, en una inusual tarde de lluvia en la comarca. A golpe de guitarra eléctrica la formación cartagenera presentará su ‘Cowboy de la A3’, un homenaje a la carretera que los une al mundo con doce paradas. Compartirán cartel con más de medio centenar de bandas y artistas, como Rubén Blades, Susana Baca, Calamaro y Califato ¾, entre otros.

Eugenio González Cremades, programador del festival tras el fallecimiento de Paco Martín y responsable de comunicación, ha mantenido la filosofía de su creador, y el público ha respondido llenando los escenarios durante las últimas cuatro ediciones. “La Mar de Músicas nació como un festival público para grandes nombres de la escena alternativa, y así sigue, pese a la subida de los cachés de los artistas”, afirma.

Auditorio Paco Martín y Teatro Romano de Cartagena

 

Entre el 9 de mayo y el 10 de septiembre, el Museo Picasso Málaga tiene previsto acoger la exposición ‘Picasso escultor. Materia y cuerpo’, definida por Lebrero como “la primera gran muestra escultórica del artista que se podrá ver en España”. De octubre a marzo de 2024, llegará ‘El eco de Picasso’, dedicada a estudiar el peso de la obra del artista en el arte actual. Por su parte, Carlos Ferrer cree que cualquier oportunidad es buena para redescubrir al genio, como a él mismo le sucede desde el ámbito de la investigación: “Da la sensación de ser un ovillo infinito, con algunos hilos conectados y otros sueltos.

La obra de Picasso nos sorprende porque pensamos que ya está todo dicho, y nada más lejos de la realidad. El gran legado de Picasso es la libertad creativa”. Y añade: “Él mismo decía que hacía arte para el presente, con la intención de que siempre permaneciese en el presente. Y la verdad es que, al menos hasta hoy, lo ha conseguido”.

El viaje entre Madrid y Murcia se realiza en los trenes del servicio AVE y, a partir de esta capital, se llega hasta Cartagena utilizando los billetes combinados que ofrece Renfe para enlazar con trenes de Larga y Media Distancia. Desde Barcelona se puede viajar, asimismo, en Intercity y en trenes con enlace.