La magia del sol y la tierra
España es uno de los mayores productores de vino del mundo y los españoles somos grandes apreciadores, y no es para menos teniendo en cuenta la altísima calidad de nuestros caldos. Buena prueba de ello es que en los últimos años el turismo enológico se ha convertido en una de las propuestas más exitosas para conocer nuestra geografía: cultura, gastronomía y enología, un indiscutible trío de ases. Súbete al tren y disfruta de los mejores vinos de nuestro país.
Empezamos por la D.O.Ca La Rioja, la más antigua de España y, sin duda, la más popular.
Siempre es un buen momento para visitar las tierras riojanas y degustar sus vinos, pero te proponemos visitar la localidad de Haro en febrero, durante el Carnaval del Vino de Haro, una de las citas enológicas más esperadas de La Rioja y toda una fiesta para los amantes del buen vino.
Exploramos ahora tierras castellanas para disfrutar de la D.O. Rueda, una de las que más fama ha conseguido últimamente. En concreto, nos vamos a Medina del Campo, villa histórica con propuestas gastronómicas de altísimo nivel: no puedes perderte el exquisito lechazo de tierras de Medina regado con los excelentes vinos de aquellas tierras. Espectacular.
Seguimos nuestro recorrido por territorios cuyas denominaciones de origen son menos conocidas, pero de una calidad extraordinaria. En Campo de Criptana, Ciudad Real, podrás catar los mejores vinos D.O. La Mancha mientras disfrutas de los escenarios más emblemáticos de El Quijote.
En Monforte de Lemos, Lugo, te recomendamos visitar el Centro del Vino, un espacio que aglutina las actividades relacionadas con la historia de la D.O. Ribeira Sacra.
Otro interesante museo del vino lo encontrarás en Olite, Navarra, ubicado en un palacete del siglo XII en el que podrás empaparte de la rica cultura vinícola de la región.
Y qué decir de la Feira do Viño do Ribeiro de Ribadavia. La fiesta vitivinícola más antigua de Galicia celebra cada primavera la calidad de su Ribeiro con catas, talleres gastronómicos… y gaitas, claro.
Mención aparte merecen los vinos de Jerez, otra de las de D.O. más conocidas dentro y fuera de nuestras fronteras. Una buena manera de disfrutarlos y conocer mejor su cultura es hacer ruta por las bodegas de Jerez de la Frontera, algunas de las cuales ofrecen, aparte de la cata con aperitivo, exhibiciones ecuestres e incluso actuaciones flamencas. Toda una experiencia.
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